No me pidas nada,
y te daré todo.
Mi naturaleza es dar.
No me pidas nada,
escucha, recibe.
Ahí estará.
Escucha, recibe.
Y si no está,
de mi no saldrá.
Escucha, recibe.
Aquí estoy yo,
no hay nadie más.
Yo, como las sumas de mis miles de yo, mis viejos yo poético, y yo analítico, ambos renovados, y mis otros yo, además del filatélico y cinéfilo de antes, en estos años se agregaron especialmente el yo milonguero, y el yo biodanzante, a los yo que siempre estuvieron y nunca aparecieron como el yo literario, el yo musicólogo, y otros yo que quizás aún no conozco.
2 comentarios:
gracias Diego, me gustó mucho tu poema. Abrazo, Laura H
Hola Laura,
Muchas gracias por tu comentario. Me alegro que te haya gustado lo que escribí.
Nos estaremos viendo.
Que pases lindo.
Besos,
Diego
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